1. Datos personales.
Me llamo Vanesa Juárez, nací en Puerto Madryn y tengo
35 años.
2. ¿Dónde estudiaste?
¿Trabajás actualmente de tu profesión? ¿Desde cuándo?
Me recibí de Diseñadora Gráfica en la UBA (Universidad
de Buenos Aires). Actualmente trabajo en el Museo de Arte de Puerto Madryn en
el área de Comunicación Visual. También trabajo de forma autónoma desde el año
2002, haciendo trabajos de diseño gráfico para privados.
3. ¿Cuál es el modelo
de mujer que transmitís en tus trabajos?
Me gusta mostrar a una mujer activa, trabajadora,
vivaz, emprendedora. En las revistas ponen a mujeres bellas, que, como
diseñadora gráfica, me toca retocar para que esa belleza responda a los
estereotipos.
4. ¿Te parece que el
estereotipo de mujer ha cambiado en la publicidad? ¿Desde cuándo? ¿Qué cosas te
hacen ver eso?
En algunas cuestiones sí ha cambiado. Aunque las mujeres
de la mayoría de las publicidades siguen siendo irrealmente bellas, también se
les da lugar a las personas con sobre peso o de mayor edad en programas de
televisión y variadas publicidades (no obstante, estas publicidades o reality
shows están orientadas a la belleza exterior).
En las publicidades actuales, la mujer es más dinámica,
es decir, ya no está en pose presentando un producto, sino que ahora también
sale a trabajar. Sin embargo, sigue siendo joven, alta, flaca, bonita, etc.
Se puede observar que los parámetros cambian, guiados
por la sociedad, ya que las publicidades muestran los productos que la gente
quiere consumir.
De todas formas me parece que ya no se puede hablar de
estereotipos, porque estos evolucionan rápidamente (debido a los medios de
comunicación, como la televisión o la Internet, que hacen todo más dinámico y
más efímero) y dependiendo de las edades de los consumidores.
5. ¿Pensás que hay
elementos de violencia de género en la publicidad actual?
Me parece que no. Creo que la publicidad va por el
lado del “lavaje de cerebro”, para vendernos los productos. No puede ser
violento, porque los actores de las publicidades están de acuerdo con ello y se
les paga; además el consumidor siempre tiene la opción de cambiar de canal si
una publicidad no le gusta.
Quizá como violencia podría denominarse el hecho de
que se nos falta el respeto al querernos vender un estereotipo y un mundo
consumista en el que las cosas son fabricadas de manera que no duren por mucho
tiempo, para así tener que seguir consumiendo.
Sí puedo decir que vivimos en un mercado machista,
pero eso está cambiando: la mujer está más presente, no se somete.
6. ¿Viviste alguna vez
el modelo de mujer que se muestra en las publicidades?
Justamente todo lo contrario. Mi mamá se separó del papá de
mi hermano mayor y comenzó a trabajar para mantenernos, así que crecí con un
modelo de mujer que trabajaba y que no se dedicaba exclusivamente a mantener en
orden la casa.
Lucía Aroz